Filosofía Personal
El pensamiento de las personas se manifiesta y sus obras lo proyectan.
Hace unos días una inteligente persona amiga me obsequió un ejemplar de su primer libro publicado.
Se trata de una recopilación de cuentos breves; una selecta colección de relatos escritos con singular maestría y belleza literaria que me sorprendió gratamente; surgidos en parte de su propia experiencia y de las experiencias de familiares y conocidos; vividas en una provincia argentina; que refleja un muestrario de criaturas propias del mundo contemporáneo, en un marco costumbrista, sumergidas en las temáticas clásicas de las tragedias humanas.
Su profesión médica le permite a esta autora utilizar el terreno literario para expresar su punto de vista existencial sobre la realidad, a través de las luchas, las angustias, los fracasos y los desencuentros de los protagonistas de sus cuentos.
Un producto literario nos muestra cómo pensamos y qué visión de la vida tenemos,así como la elección de los temas, su desarrollo y su desenlace.
Pude llegar a conocer más a esta amiga a través de su obra literaria, que la identifica plenamente como alguien con gran capacidad de observación, profundidad de sentimientos y con la gran lucidez de poder detectar las imperfecciones humanas con suma fidelidad y de llegar a vislumbrar el rumbo de sus vidas a partir de sus comportamientos.
“El beso infernal” nos introduce en el itinerario de una venganza feroz; una pasión humana difícil de vencer que sumerge al hombre en el mundo de las sombras y que lejos de dar la paz que se anhela deja un sabor amargo.
En “El mensaje” vemos que la vida se cobra todas las acciones destructivas y que el consuelo puede llegar precisamente de quienes menos se espera.
“Seducción” recorre el sendero de los amores no correspondidos, los enigmas que hacen elegir siempre determinadas parejas y hasta dónde una persona se puede equivocar.
“Entre Sombras y Silencios” lleva al lector a través del laberinto que desatan las terribles consecuencias del abandono y la falta de amor.
“Un grito en la oscuridad” revela el nefasto camino del vicio que despoja al hombre de los más genuinos valores.
En conjunto, un cofre de buena literatura que pone de manifiesto a través del arte una cosmovisión.
La filosofía de la gente cambia la historia de las naciones, y la literatura es una de sus formas de expresión.
El arte, en cada momento histórico, imprimió en las obras humanas, el modo de pensar.
Woody Allen, refleja en cada una de sus películas su filosofía, una constante búsqueda del significado de la vida y el misterio de la muerte, y el intento de comprender al hombre tratando de bucear en el interior de sus personajes, proyecciones de si mismo, para poder vislumbrar una posible respuesta que lo libere de su constante cuestionamiento.
Su forma de pensar, nihilista, marca cada uno de sus films, los cuales han trascendido precisamente por el compromiso que asume frente al público exponiendo su cosmovisión.
Todos imprimimos en nuestras obras y en cada uno de nuestros actos nuestra propia filosofía sobre la realidad, porque nadie puede ocultarse cuando se expresa, cualquiera sea el canal de esa expresión.
La forma de pensar del hombre condiciona la realidad y la realidad nos induce a pensar.