Qué es la iluminación
Deepak Chopra dice que estar iluminado es una posibilidad al alcance de todos porque es un proceso natural. Sin embargo son pocas las personas que lo logran.
Si somos capaces de permanecer en silencio con nosotros mismos, tarde o temprano tendremos la misma experiencia que puede tener un monje budista, más o menos superficial o más profunda según el nivel de crisis que uno es capaz de tolerar; porque el despertar implica enfrentar los contenidos más oscuros de la conciencia.
Si en las profundidades de uno mismo subyacen el miedo, la culpa, los apegos o la negación de la sombra, seguirán existiendo el sufrimiento y la polaridad del bien y del mal y será imposible ver la unidad.
Mientras se continúe fragmentado interiormente, pensando, actuando y diciendo cosas diferentes, se permanecerá aprisionado por el temor, los deseos insatisfechos y la ignorancia; con un estado de conciencia inactivo y dormido y sin poder darse cuenta de cuál es la verdad.
La salida está más allá de la lucha y de la resistencia, porque la realidad es la que es, no la que nosotros quisiéramos que fuera; cuando el propio yo sea para uno suficiente, no tenga ninguna preocupación ni pretensión y sólo se sienta satisfecho de estar vivo, de respirar, de disfrutar de la naturaleza.
Las personas que han alcanzado estados de conciencia elevados han experimentado satisfacción completa y duradera. Es la misma sensación de plenitud que se siente cuando experimentamos la felicidad de estar en paz con nosotros mismos y cuando aunque estemos solos nos sentimos acompañados y protegidos.
Pero este estado se disipa cuando volvemos a sumergirnos en las ilusiones externas y las creemos.
Sin embargo, una vez que se ha experimentado el despertar, se siente la necesidad de volver a esa tranquilidad espiritual interior que nos ayuda a desapegarnos.
La diferencia entre el que permanece con la conciencia fragmentada y el que puede darse cuenta de la unidad que existe en todas las cosas es el fin del sufrimiento y la libertad, cuando se está dispuesto a entregarse y aceptarlo todo.
La entrega es lo que hace que las cosas se ordenen; por eso, si puedo cambiar mi mente, como el mundo y yo son uno y lo mismo, puedo cambiar el mundo.
Los rishis, antiguos místicos de la India, afirman que tenemos poder sobre la naturaleza y que podemos influir sobre todos los átomos del universo. Sin embargo, con el nivel de conciencia que tiene la humanidad, cada persona se siente insignificante y expuesta a todos los males.
Esta ignorancis es la trampa que hace que se cumplan todos nuestros temores.
La iluminación llena de luz hasta los contenidos de la conciencia más oscuros y exige enfrentar los antiguos dolores que son verdaderas cicatrices cerebrales que han dejado una huella indeleble en el sistema nervioso.
No es necesario salir a buscar la iluminación sólo se necesita quietud y soledad.
Para saber si uno ha logrado la iluminación sólo basta con observar si se cumplen todos nuestros deseos, porque cuando alcanzamos la paz y el equilibrio, el mundo también se vuelve pacífico y equilibrado y el pensamiento se torna mágico.
No es necesario ningún esfuerzo, sólo hay que estar atento y consciente de nuestras verdaderas necesidades; y el miedo deja de tener sentido, porque recién podemos darnos cuenta de los simple que es la vida.
Fuente: “Vida sin condiciones”, Deepak Chopra.