La confirmación
Es una de las primeras tesis de la concepción heredada en ser atacada y formado parte durante buena parte del siglo pasado dentro del ámbito de la filosofía de la ciencia. El debate tiene dos aristas, se plantea desde dos perspectivas de confirmación: la cualitativa y la cuantitativa. La primera se centra en la relación entre las hipótesis científicas y la evidencia observacional que puede confirmarlas (se realiza un análisis conceptual entre evidencia e hipótesis); por la segunda, se asignan grados de confirmación a la hipótesis, en base a la evidencia observacional. La perspectiva cualitativa es previa a la cuantitativa.
La inducción
Pero, ¿cómo podremos elaborar teorías basándonos en hechos observacionales, que por su esencia tienen que ser particulares? Es decir, basándonos en la inducción. Y, claro, una vez hemos elaborado una teoría, en qué medida los datos observacionales nos podrán ayudar a creérnoslas.
A estas dos vías, dos caminos, se les conoce como camino descendente y camino ascendente (inducción). La ciencia teóricamente maneja ambos, recorriéndolos, pero no siempre sucede así.
El camino inductivo del conocimiento, el ascendente, es atacado por los filósofos post-positivistas y por otros como el filósofo Karl Popper. Según este último, este tipo de conocimiento, si se acepta, niega la posibilidad de aceptar las teorías científicas como sistemas lógicos. Para él, es un error asumir que a partir de un número finito de enunciados particulares se puede llegar a deducir de manera válida un enunciado universal.
¿Son todos los cisnes blancos?
Para mostrar el problema analicemos la siguiente frase: «Todos los cisnes son blancos». Antes de formularla supongamos que hemos visto cientos de cisnes y que todos eran blancos, lo que nos ha llevado a formular la frase anterior. Pero, ¿realmente todos los cisnes que ha habido, hay y habrá han sido, son y serán blancos? Con que en algún momento del presente encontremos un solo cisne que no sea blanco, nuestra frase quedará invalidada. Pero lo mismo ocurrirá si lo encontramos en cualquier tiempo. Realmente nunca sabremos si la frase es verdadera. Como mucho podríamos asegurar que todos los cines que he visto son blancos, pero eso no es un enunciado universal, y la ciencia se fundamenta en el establecimiento de enunciados universales.
Los procesos científicos comienzan en la observación, a partir de los datos adquiridos se proponen teorías, que más tarde se someterán a contrastación científica, pero no existe una lógica para la formulación de leyes e hipótesis.
La contrastación
Si los filósofos post-positivistas, a partir de Thomas Kuhn, niegan el camino ascendente, o lo critican por erróneo, desde la la concepción heredada se responde que aun teniendo aquellos razón todavía nos quedaría la cuestión de la contrastación. Aunque no exista una lógica para la formulación de generalizaciones empíricas sí que puede existir una para que dichas formulaciones sean contrastadas y, por tanto, verificadas.
Para que una teoría sea aceptada y tenga relevancia dentro de la comunidad científica debe tener un alto grado de confirmación. Sin embargo, no se podría asegurar que es verdadero, ya que nos encontraríamos con el problema lógico, señalado más arriba.
No se puede convertir a un enunciado en verdadero, porque siempre puede ser negado (en nuestro caso, en cuanto veamos un cisne que no sea blanco), pero sí que se puede ir añadiéndole grados de confirmación.
Imagen: madrimasd.org