Filosofía
Inicio Mitología Los Símbolos Permanentes

Los Símbolos Permanentes

Publicado por Malena

Los Símbolos Permanentes

Según Carl Gustav Jung, los símbolos y mitos que hemos heredado de la antigüedad sobreviven aún hoy en día en nuestro inconsciente.

Cada descubrimiento arqueológico, además de describir los acontecimientos históricos, también nos hablan de antiguas creencias que los filólogos y los historiadores de religiones nos pueden traducir en lenguaje actual.

Estos mismos símbolos es posible encontrarlos en los ritos o mitos de las comunidades tribales que aún sobreviven, y han permanecido desde siempre a un paso de la civilización moderna.

La complejidad de la modernidad suele subestimar la importancia de estos símbolos, por pertenecer a la antigüedad o a culturas consideradas atrasadas, creyendo que pueden prescindir de esos ritos antiguos por ser supersticiones arcaicas.

Los visionarios son considerados perturbados mentales y no somos capaces de ver la relación entre los mitos de los antiguos griegos o las leyendas de los indios y los sucesos dramáticos que acontecen hoy en día.

Sin embargo, esa relación existe y esos símbolos siguen siendo importantes para la humanidad.

Según Carl G. Jung, para el hombre primitivo los símbolos formaban parte de su vida cotidiana mientras que para el hombre moderno parecen no tener importancia.

La mente humana conserva los rastros de las etapas anteriores de su desarrollo en el inconsciente y ejercen una influencia formativa.

En forma consciente podemos ignorar ese contenido, pero inconscientemente estas formas simbólicas influyen en nosotros.

Siguiendo a Jung, algunos de los símbolos que aparecen en los sueños provienen del “inconsciente colectivo”, o sea ese sector de la psique que contiene y transmite la herencia psicológica de la humanidad.

Estos símbolos son tan antiguos que para el hombre moderno resultan difíciles de entender.

Es posible descubrir el valor que conserva en forma permanente un símbolo antiguo que trata en forma continua de renacer.

Existe una analogía entre los mitos antiguos y los sueños del hombre moderno, porque en el inconsciente se conserva la capacidad de crear símbolos, que antiguamente tenían su expresión en las creencias y en los rituales del hombre primitivo.

Esta capacidad del hombre son aún hoy de gran importancia psíquica, porque tales símbolos transmiten mensajes y nuestra conducta y actitudes pueden estar profundamente influidas por ellos.

Los grandes escritores de la humanidad de todos los tiempos han sabido expresar todos los temas universales, trascendiendo las diferencias de tiempo y lugar y la amplia acogida que tuvieron sus escritos se debió principalmente a que esos temas son fundamentalmente simbólicos.

Un ejemplo es el simbolismo del renacer del hombre en la Navidad, independientemente de la creencia que se tenga.

Este simbolismo se basa en un festejo muy antiguo del solsticio, con la esperanza de la renovación del paisaje invernal en el hemisferio septentrional.

Otros salvadores como Osiris ú Orfeo, también tuvieron origen divino, crecieron, fueron muertos y resucitaron, perteneciendo a las religiones cíclicas en que la muerte y la resurrección de un dios era un mito eternamente repetido.

Cuanto más se estudia la historia y el papel de los símbolos en las diversas antiguas culturas más comprensible resulta su significado de recreación.

Algunos símbolos se relacionan con las distintas etapas de la vida, y estas ideas simbólicas se pueden producir en la mente del hombre moderno, del mismo modo en que se producían en los rituales de las comunidades antiguas.