Lugares Sagrados
Los lugares sagrados o de peregrinación, son sitios donde se encuentran templos, iglesias, catedrales y basílicas, que fueron construidos con propósitos espirituales y religiosos por grupos humanos de todas las religiones.
Curiosamente, estos centros de devoción parecen estar conectados y formar una red sagrada; y cuanto más importante es el lugar mayor es la concentración de redes.
Aparentemente, el factor que se ha utilizado para su construcción ha sido siempre la orientación solar para adecuarse a dicha red.
La ubicación del altar, principalmente la que se le dio por primera vez, es el punto de mayor concentración energética de dicha fuente, además de la coincidencia de otros factores como el agua.
En algunas iglesias es interesante observar ventanas por donde entran los rayos solares en determinadas fechas significativas para el culto, coincidiendo con las redes solares.
Cada lugar sagrado presenta un símbolo que señala la importancia del lugar con respecto a la red sagrada.
En la basílica de San Lorenzo de El Escorial, una pintura de San Andrés con la cruz, ubicado en el lugar preciso, muestra la existencia de la red sagrada en ese lugar.
Otro factor común que se puede encontrar en los lugares sagrados es la existencia de agua subterránea.
El agua es el elemento imprescindible para construir una iglesia. Si por algún motivo no se encontrara agua en ese preciso lugar, se construirán caminos de canto rodados de río para evocar la memoria del agua, tal como sucede en la iglesia de Triesur-Baise (Gers).
En la catedral de Chartres y de Santiago de Compostela existen 14 canalizaciones artificiales de agua subterránea en ambas, que convergen en un punto que se encuentra en el cruce del transepto de la catedral, que se considera el de mayor nivel vibratorio del lugar.
La molécula del agua tiene una especial importancia en los lugares sagrados, porque parece ser que es ella la que sirve de resonancia a las radiaciones cósmicas en forma de ondas gravitacionales, que vienen desde el centro de nuestra galaxia; tal como se ha demostrado en trabajos científicos, como el del profesor Piccardi de la Universidad de Florencia y los de Teodoro Schenk, André Faussurier y otros.
Según las creencias populares, es la energía de la tierra la que le da al agua sus poderes curativos.
Los menires de la isla de Pascua fueron construidos por los druidas sobre un cruzamiento, como mínimo, de dos corrientes de agua y en todas las iglesias existen varias.
Estas corrientes de agua se encuentran en una interacción sincronizada de las redes sagradas, la construcción y la tierra.
Estos elevados niveles vibratorios serían perjudiciales para la salud humana en lugares comunes, pero en los lugares sagrados sirve para transmutar la densidad en luz y llegar a lo más luminoso.
Las mediciones vibratorias que intentan estudiar y registrar los científicos con la tecnología actual para ponerse de acuerdo, es una dificultad difícil de sortear más allá de las cuestiones subjetivas, lo que hace que se mantenga el misterio y que su explicación se circunscriba al ámbito de las creencias.
Además de los elementos ya mencionados, muchos lugares sagrados también están alineados con constelaciones específicas. Por ejemplo, las pirámides de Giza en Egipto están alineadas con la constelación de Orión, lo que sugiere una conexión entre la tierra y el cosmos que va más allá de lo meramente arquitectónico.
En Machu Picchu, el Intihuatana, o «lugar donde se amarra el sol», es una piedra ritual que se alinea perfectamente con el sol durante los solsticios, demostrando una vez más la importancia de la orientación solar en la construcción de estos lugares.
Otro aspecto fascinante es la acústica de estos lugares. En la catedral de Notre-Dame de París, por ejemplo, la arquitectura está diseñada de tal manera que los cantos y oraciones resuenan de una forma que eleva la experiencia espiritual de los fieles. Este fenómeno no es exclusivo de Notre-Dame; muchas otras catedrales y templos alrededor del mundo muestran una atención similar a la acústica.
En la India, el Templo de Brihadeeswarar en Tamil Nadu es otro ejemplo de un lugar sagrado que incorpora elementos arquitectónicos y naturales. Este templo, dedicado a Shiva, no solo está alineado con el sol, sino que también tiene un sistema de canalización de agua que se cree que purifica a los devotos.
Los lugares sagrados también suelen estar rodeados de leyendas y mitos que añaden otra capa de significado. En el Monte Athos en Grecia, se dice que la Virgen María bendijo la montaña, convirtiéndola en un lugar de retiro espiritual exclusivo para los monjes ortodoxos.
Finalmente, es importante mencionar que estos lugares no solo son puntos de devoción religiosa, sino también de encuentro cultural y social. En muchos casos, las festividades y peregrinaciones que se llevan a cabo en estos sitios atraen a personas de diversas partes del mundo, creando un espacio de intercambio cultural y espiritual.
Fuente: Daniel Rubio, “Convivir”, Sección Conocimiento, “Lugares sagrados, lugares iniciáticos”, Setiembre 2011.