Avicena
Abū ‘Alī al-Husayn ibn ‘Abd Allāh ibn Sīnā, más conocido como Avicena, fue un científico, médico y filósofo de origen persa. Nació en el año 980 d. C. en la ciudad de Afsana. En todos los rincones del mundo, tanto cristianos como islámicos, era llamado «El Maestro Supremo». También tiene en su haber el ser el filósofo islámico más citado, estudiado, comentado y leído de la historia.
Fuente de inspiración tanto de filósofos como de poetas, Avicena fue el primero en arribar a varios terrenos inhóspitos en varias ramas del saber. Por ejemplo, en el campo de la medicina inventó la traquetomía y el primero en diagnosticar varias enfermedades, como la pleuresía. Por su parte, en lógica fue el primero en definir de forma clara las modalidades temporales.
La metafísica de Avicena
La metafísica de Avicena se caracteriza por sus distinciones ontológicas. Por un lado, distinguió entre esencia y existencia. Las esencias de los seres existentes no se explicaban en términos de formas actualizadas de sus potencialidades materiales, sino en términos de una causa existente y prioritaria en términos lógicos. Por otro lado distinguió entre ser posible, ser necesarioy ser imposible.
La realidad se estructuraba, según el punto de vista de Avicena, en una jerarquía de entidades, ordenadas en términos causales, esto es, las de rango superior son causa de las entidades de rango inmediatamente inferior. Salvo el ser que ocupa la cúspide de esta jerarquía, todos los demás son contingentes. El ser que se encuentra en el extremo superior, por el contrario, es un ser necesario, cuya esencia y existencia son idénticas. De este modo, el Ser Necesario existe por sí mismo y es causa del resto de seres.
La teoría del conocimiento de Avicena
El conocimiento depende del tipo de objeto a conocer, de su realidad. De igual modo que la realidad está jerarquizada en tipos de seres, el conocimiento varía en función de la realidad de su objeto. El entendimiento humano, según el filósofo persa, se divide en diferentes tipos de intelecto, cada uno de los cuales se adecua a un tipo de objeto en particular.
Llegamos a conocer desde lo más particular a las formas más generales. Pero para llegar a este nivel hemos de llevar a cabo un progresivo proceso de abstracción.
La obra de Avicena
Avicena fue un autor muy prolífico que tocó gran variedad de temas. Escribió la mayor parte de su obra en árabe clásico, aunque en ocasiones hizo uso del persa.
De todos sus textos el más conocido fue el Canon de Avicena, al-Qanun, una extensa enciclopedia médica formada por 14 volúmenes escrita hacia el 1020. En esta enciclopedia Avicena combina su propia experiencia médica con los escritos de Sushruta, Charaka y Galeno, además de con la medicina árabe y persa tradicional.
Dentro del campo de la filosofía su obra principal fue La curación, al-Shifá. Es una enciclopedia que tuvo una repercusión similar a al-Qanun. Probablemente sea la obra filosófica de mayor tamaño escrita por un solo hombre. En ella se incluyen temas de física, lógica, botánica, metafísica, zoología, música, psicología y matemáticas. También de similar importancia es el Libro de las orientaciones y las advertencias, Kitab al-Isharat wa-l-tanbihat. Es una obra de filosofía y mística. Destaca porque en ella aparece un argumento que precede al cógito cartesiano.
Estas son las obras más importantes, sin embargo el catálogo de sus libros es bastante grande. En cualquier caso, Avicena abarcó todos los campos del saber de su época: poesía, lógica, física, lingüística, psicología, matemáticas, medicina, música, química, astronomía, economía, metafísica, ética, comentarios del Corán y mística.