Historia de la lógica (IV): la Alta Edad Media
La Edad Media se divide en Alta Edad Media y Baja Edad Media. La Alta Edad Media va de los siglos V al XII. Es el periodo en el que los antiguos patricios romanos se convierten en nuevos señores feudales. Después viene la Baja Edad Media, que comienza en el siglo XII y finaliza en el XV. Y, aunque desde el punto de vista de la historia de la lógica no sucede nada lo suficientemente interesante como para establecer una nueva época, por comodidad nos basaremos en las etapas de la historia genérica.
Mi punto de vista sobre la Alta Edad Media
Soy del punto de vista de que la Alta Edad Media es bastante insípida desde un punto de vista filosófico, con la salvedad del mundo árabe y de Pedro Abelardo. Y es que la disolución del Imperio Romano debió sumir el mundo occidental en una especie de caos cultural. En efecto, casi de forma misteriosa, buena parte del valioso saber antiguo se dispersa, en el mejor de los casos. La clase culta romana se preocupaba por aprender griego y leer los textos griegos, pero esto quedó ausente en el mundo altomedieval cristiano.
Sin embargo, en el siglo VII a Mahoma se le cruzan los cables, cree haber recibido órdenes de Dios y comienza a moralizar y enseñarle a su pueblo normas básicas de higiene. Nace el islam y con él, una floreciente cultura que se extenderá desde La Meca hasta la Península Ibérica y por el norte de África. En esta época el mundo islámico vive una ilustración y es gracias a esta ilustración que el saber del mundo griego no queda perdido en el olvido. Los árabes, con al-Farabi y Averrores a la cabeza, leerán, comentarán y trabajarán sobre autores como Aristóteles, en aquel momento un desconocido en el mundo cristiano.
Los árabes y la transmisión de la lógica aristotélica
Desde aproximadamente el siglo V a. C. en que Aristóteles desarrolló su lógica silogística, hasta la lógica de Frege y Russell, del siglo XIX d. C., la lógica aristotélica fue el nova más en el mundo del saber. Fue a través de los comentarios de Averroes sobre el Organón de Aristóteles, así como mediante las obras de al-Ghazali, Avicena y al-Farabi, que el mundo medieval pudo conocer la lógica aristotélica.
La lógica árabe
Además de comentar a Aristóteles, sistematizarlo, leerlo y criticarlo, los filósofos islámicos también desarrollaron su propia concepción de la lógica. En primer lugar, esta estaba muy arraigada a otras concepciones epistemológicas, metafísicas y de filosofía del lenguaje, tanto es así que los filósofos islámicos se vieron profundamente interesados en el estudio de las relaciones entre lenguaje y lógica. En segundo lugar, consideraron el silogismo como una forma de argumentación a la que todas las demás podían ser reducidas, siempre que fueran racionales. De este modo, la lógica giraría en torno a esta forma de argumento.
Merece la pena destacar los aportes de Avicena, quien introdujo el silogismo hipotético y la lógica inductiva, proponiendo un sistema sustituto de la lógica de Aristóteles.
La lógica en la Baja Edad Media
A medida que avanzamos hacia la Baja Edad Media, la lógica comienza a tomar un papel más prominente en los debates filosóficos. En este periodo, la lógica se convierte en una herramienta indispensable para los filósofos y teólogos. La lógica se utiliza para analizar y resolver problemas teológicos y filosóficos, y se convierte en una disciplina académica en sí misma.
En este contexto, surge la figura de Pedro Abelardo, un filósofo y teólogo francés, conocido por su enfoque lógico en la filosofía y la teología. Abelardo fue uno de los primeros en utilizar la lógica para analizar las Escrituras y los dogmas de la Iglesia. Su obra «Sic et Non» es un ejemplo de cómo utilizó la lógica para cuestionar y analizar los dogmas de la Iglesia.
Además de Abelardo, otros filósofos y teólogos de la Baja Edad Media también hicieron contribuciones significativas a la lógica. Por ejemplo, Tomás de Aquino utilizó la lógica para reconciliar la filosofía aristotélica con la teología cristiana. Su obra «Summa Theologica» es un ejemplo de cómo utilizó la lógica para analizar y resolver problemas teológicos.
En resumen, aunque la Alta Edad Media puede parecer un periodo insípido desde el punto de vista de la historia de la lógica, la realidad es que fue un periodo de transición importante. Fue durante este periodo que la lógica aristotélica fue redescubierta y transmitida al mundo occidental, y fue también durante este periodo que la lógica comenzó a ser utilizada como una herramienta para el análisis y la resolución de problemas filosóficos y teológicos.