El Sentido Común
El sentido común es la capacidad de discernimiento que tiene todo ser humano que le permite tomar decisiones coherentes, basadas en la razón y sus conocimientos; actitud que resulta la mejor y más conveniente tanto para sí mismo como para relacionarse con los demás.
Una persona con sentido común es prudente y confiable; se toma su tiempo para reflexionar antes de actuar o hablar y aunque no tenga todos los conocimientos que necesita en determinada circunstancia, puede elegir la decisión más correcta.
El sentido común es la interpretación del mundo que todos pueden captar con los sentidos, en la que intervienen distintas funciones psicológicas como la percepción, la memoria, el pensamiento, la deducción, la previsión, el razonamiento, los valores y el juicio.
Con todos estos elementos, una persona está en condiciones de tomar conciencia de la realidad de la forma más acertada posible, para saber lo que tiene que hacer en un momento dado e implementar la solución más sensata y práctica.
El sentido común es un sentido adicional que nos ayuda a realizar elecciones exitosas para nuestro propio beneficio personal y profesional.
Utilizar el sentido común como estilo de comportamiento, conocerse más y contar con la información necesaria sobre el tema que nos ocupa, es lo que una persona necesita para actuar de la mejor manera.
A pesar de contar con esta habilidad, la mayoría no utiliza el sentido común y se comporta en forma impulsiva y precipitada, dejándose llevar por sus emociones y sin pensar antes de actuar.
Es común que la gente haga o diga cosas que no le conviene y de las que luego se arrepiente, porque no se puede controlar; sin darse cuenta que esa actitud está contradiciendo sus propios intereses.
El desarrollo del sentido común es posible y una forma de aprender es recordar que tenemos que buscar soluciones nuevas para los problemas nuevos, porque las viejas fórmulas no sirven, la realidad cambia y nosotros también tenemos que cambiar.
Aprender a escuchar es una virtud porque nos enseña a utilizar las experiencias de los demás para beneficio propio. No hay que olvidar que el que sabe escuchar se enriquece y el que habla demasiado se empobrece.
Cuando atravesamos momentos difíciles que nos perturban emocionalmente, lo mejor es esperar a estar sereno para tomar una decisión, porque las emociones obnubilan el pensamiento y nos llevan a reaccionar en forma violenta.
Es importante conocer a fondo el tema sobre el cual deseamos emitir una opinión, porque es necesario hablar con fundamento para que nuestros dichos sean confiables y creíbles.
Tenemos que aprender a guiarnos por el sentido común, porque es el menos común de los sentidos y el que nos ayuda a hacer y decir lo correcto.
La impaciencia, el ritmo de vida acelerado y la auto exigencia, hace que nos arriesguemos a equivocarnos.
Hay cosas que no se pueden acelerar, porque necesitan tiempo para madurar y saber esperar es una de las claves del éxito.
La firmeza del carácter es la que nos ayuda a manejarnos con sentido común.