Platón y la esencia
El mundo sensible no tiene ni esencia ni existencia, es pura apariencia.
Platón, filósofo griego del siglo V a. de C., recibió una gran influencia de Parménides y de Sócrates. Pertenecía a una familia de buena posición económica y tuvo oportunidad durante diez años de viajar y de tener contacto con otros filósofos de esa época.
Parménides identifica al Ser con el Pensar, es decir, sólo le otorga existencia y esencia al mundo inteligible, en tanto que las cosas de la realidad para él son ilusorias.
El Ser no se puede definir porque es indefinible pero podemos investigar quién o qué es lo que existe y en qué consiste. Es decir, la realidad de su existencia y de su esencia.
Para lograr saber quién es el Ser es necesario que no pueda ser contenido en otra cosa y que él sea su única condición, inmodificable y permanente.
Ser significa existir, estar ahí y consistir cuál es su esencia o consistencia, en qué consiste.
Tampoco podemos definir qué es el existir, es algo que cada uno percibe a medida que vive pero que no se puede saber qué es. Pero sí podemos averiguar quién existe o qué es lo que existe.
La metafísica es la ciencia que trata de dar una respuesta sobre la auténtica existencia, de la existencia en sí.
En cuánto a qué es lo que consiste es la teoría del objeto o la teoría de la consistencia en general.
Estas dos teorías han sido mezcladas muchas veces pero hay que mantener la distinción entre el enfoque metafísico sobre la existencia y el enfoque objetivo de la consistencia, aunque no siempre sea posible.
Parménides es realista porque le otorga existencia al pensar; sólo el pensar existe y consiste. Consiste en el pensamiento racional, inteligible.
Platón generaliza el pensamiento de Parménides y propone que tienen esencia y existencia las ideas de todas las cosas y estas ideas se encuentran en el mundo inteligible, siendo la realidad sensible pura apariencia que no se puede comprender.
La esencia de una cosa es lo que hace que ella sea eso en si misma y no sea otra cosa. La idea de silla es un «concepto», término tomado de Sócrates, que define los elementos esenciales de una silla, que de faltarle dejaría de serlo. La idea de un perro es un animal de cuatro patas con cierto tipo de estructura, pelaje, forma, que identificamos como un perro.
La idea esencial de cada cosa según Platón las recordamos de el mundo inteligible donde hemos estado alguna vez, y donde todo es perfecto y permanente, puras entelequias que no cambian que representan lo verdadero; mientras que la realidad se le asemeja sin llegar nunca a lograr esa perfección.
Para Parménides y para Platón lo único que existe se encuentra en el mundo inteligible y las cosas de la vida son simplemente ilusiones de los sentidos.
Las ideas según Platón son trascendentes, las podemos recordar pero no están en nosotros.