Relación entre Parménides, Sócrates y Platón
Platón recibe la influencia de Parménides y advierte los puntos débiles de su teoría, como la confusión entre la existencia y la esencia; y también toma elementos de la filosofía de Sócrates.
Platón toma de Parménides tres elementos importantes; el primero es el método para descubrir quién es el ser y en qué consiste, qué es la intuición intelectual, la razón y el pensamiento. Este método se basa en la reflexión y la introspección, y se considera un precursor de la lógica y la filosofía analítica.
En segundo lugar, adopta la teoría de Parménides de los dos mundos, el sensible que es ilusorio y el inteligible que es el de la razón y el verdadero. Esta teoría, conocida como dualismo, se convierte en un pilar fundamental en la filosofía de Platón, y se refleja en su famosa alegoría de la caverna.
En tercer lugar recibe el arte de la dialéctica, que consiste en discutir un argumento hasta pulirlo y encontrar la verdad. La dialéctica es una técnica de debate y razonamiento que se utiliza para examinar y refinar las ideas.
Sócrates aporta a la filosofía de Platón, el descubrimiento de los conceptos o sea las definiciones aplicadas a las cuestiones morales, el mismo método que utilizaban los geómetras al hacer su ciencia. Este método, conocido como el método socrático, es una forma de cuestionamiento y análisis que se utiliza para explorar las ideas y desafiar las suposiciones.
Los geómetras reducían los objetos a sus formas más elementales que llamaban figuras, como por ejemplo los polígonos, los triángulos, los cuadrados, etc.; y les daban una definición que incluía su origen y sus propiedades específicas. Lo mismo ocurre en el mundo moral donde existen innumerables acciones humanas que se pueden reducir a una cierta cantidad de virtudes como la justicia, la moderación, la templanza, la valentía, etc.
Luego, para llegar a saber lo que son cada una de esas virtudes aplica la intuición intelectual, o sea la razón de ellas, el “logos”, la lógica, y elabora el concepto, la definición. Este enfoque de la moral se refleja en la ética socrática, que se centra en la búsqueda de la virtud y la sabiduría.
Para Sócrates, el objeto fundamental de la filosofía es la moral, llegar a la definición más perfecta de la moral para poder enseñarla como cualquier otra ciencia, porque para este filósofo el hombre es malo porque no sabe. Esta idea de la ignorancia como causa del mal se convierte en un tema recurrente en la filosofía de Platón.
Platón extiende el concepto a todas las cosas y lo relaciona con los atributos del ser de Parménides, logrando como resultado una solución para el problema metafísico: su teoría de las ideas.
Idea es una palabra nueva en esa época, un neologismo inventado por Platón para construir la teoría de la existencia, de la objetividad y de la metafísica. Esta teoría sostiene que las ideas son las formas eternas e inmutables de todas las cosas, y que el mundo sensible es solo una copia imperfecta de estas ideas.
Descubre que el logos es una unidad sintética que incluye una cantidad de entes que forman una síntesis. La idea es esa unidad, la esencia, la consistencia que se puede contemplar con el espíritu y que tiene realidad existencial.
Idea significa visión, intuición intelectual, desde el punto de vista del sujeto que la intuye. Pero la idea en si misma, o sea el objeto de la visión, significa dos cosas: la esencia del objeto, su consistencia y la existencia real.
Por lo tanto, las ideas son las esencias que existen en el mundo inteligible, de cada cosa que existe en el mundo sensible. Este concepto de la existencia de las ideas en un mundo inteligible se convierte en una de las ideas más influyentes y duraderas de la filosofía de Platón.
El mundo de las ideas tiene muchas ideas y cada una de ellas es indestructible, inmóvil, inmutable, permanente, atemporal; y las llama modelos ejemplares, paradigmas, de las cuales cada cosa participa, sin llegar a ser nunca perfecta como ellas.
Platón agrega además, que en el mundo de las ideas existe una jerarquía y todas ellas penden de una idea superior, que es la idea del bien. Esta idea del bien es la más alta y perfecta de todas las ideas, y es la fuente de toda verdad y belleza.
Las ideas son las únicas realidades que existen, sin embargo, la teoría de las ideas de Platón no es un idealismo, como algunos pueden erróneamente suponer, sino un realismo de las ideas. Esta teoría sostiene que las ideas son más reales que el mundo sensible, y que el conocimiento verdadero solo puede obtenerse a través de la comprensión de estas ideas.
Fuente: «Lecciones Preliminares de Filosofía», Manuel García Morente.