Filosofía

Los qualia

Publicado por Malena

“Qualia” es un concepto filosófico derivado de “qualis” del latín, que significa “como es”; que designa los contenidos vivenciales subjetivos de la experiencia mental.

De esta manera los neurofilósofos llaman a la cualidad especial de toda vivencia consciente, como por ejemplo la percepción de un color, de un sabor o de una sensación psicológica subjetiva.

El hecho de que no siempre coincidan la atención neuronal que se puede verificar y la vivencia consciente (qualia), ha dado lugar a la distinción que hacen los neurofilósofos entre conciencia fenoménica y conciencia de acceso. La atención selecciona lo que percibirá y la experiencia consciente solamente se puede comprender si se estudia dentro del marco valorativo individual que tiene una determinada cultura.

La cualidad especial de la vivencia consciente trasciende el contenido informativo de una impresión sensible, porque la atención visual y la conciencia son diferentes.

Algunos interpretan que la atención selecciona lo que experimenta de modo consciente, pero el neurocientífico Vìctor Lamme cree que es al revés, que es la vivencia la que condiciona la atención.

La filosofía intenta entender la conciencia como proceso o sea el procesamiento de las señales ópticas.

Para el funcionalismo, la mente es un sistema complejo donde se intercambia información según reglas precisas, pero en esta definición no se pueden incluir los qualia.

Los epifenomenalistas proponen que los qualia, o experiencias conscientes, acompañan automáticamente a estados nerviosos determinados.

Así como la luz está formada por ondas y partículas, el cerebro humano tiene una dimensión funcional y una dimensión experiencial.

Los qualia no se pueden reducir a la biología, la química o la física, es una propiedad independiente y fundamental del universo, en igual condición que el espacio, el tiempo y la masa. Investigar sobre esta propiedad exige un abordaje científico totalmente nuevo que aún nadie conoce.

Las experiencias que procesa el cerebro como un ordenador, o sea como partículas de información, a la vez son valoradas desde el punto de vista del individuo.

La vivencia solamente se puede comprender si se analiza dentro de un contexto más amplio, o sea, el organismo y su ambiente.

El dualismo filosófico sostiene que mente y materia son sustancias diferentes que se influyen entre sí; ejemplos de defensores de este punto de vista son René Descartes, Karl Popper, John Eccles.

El paralelismo psicofísico dice que mente y materia son dos sustancias diferentes que no interactúan, o sea que los sucesos mentales y materiales tienen lugar en paralelo y según Gottfried Wilhelm Leibniz, la causa de la sincronicidad es la acción de Dios.

Los filósofos modernos desarrollan a partir de este concepto un dualismo de las propiedades, en el que el cuerpo y el alma son las dos perspectivas de una y la misma cosa.

Para el Ocasionalismo, la voluntad de hacer algo es un suceso inmaterial y es Dios el que pone el cuerpo en movimiento.

Para el Epifenomenalismo de Thomas Henry Huxley, sólo la materia actúa sobre la mente, pero no a la inversa. Esta postura no toma en cuenta cómo un estado mental puede producir una consecuencia en el cuerpo.

Para el Conductismo lo único que existe es una única sustancia, la materia y la conducta es lo único verificable. La mente es una caja negra no verificable.

Para la teoría de la identidad, los estados mentales son idénticos a los estados cerebrales.

El efecto placebo es un ejemplo de cómo las expectativas culturales producen nuestros qualia o experiencias conscientes; porque evidencian que lo que cree el paciente influye en el cuerpo.

Los qualia se deben entender a través de la interacción del organismo y el ambiente o sea del ser humano y su cultura.

La filósofa Katja Crone afirma que sin entorno social no se puede concebir una autoconciencia desarrollada.

Fuente: “Mente y Cerebro”; No.46; “Los placeres de ls qualia”; Volkart Wildermuth.