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Condicionamiento o Conciencia

Publicado por Malena

condicionamiento o conciencia

El condicionamiento social, las creencias y la vida automática, hacen perder la libertad, al poner el empeño en cumplir con las expectativas y al identificarse con el rencor, el resentimiento y el odio que sienten los demás; porque las ideas de otros pueden perturbar la vida cuando se las deja penetrar en la conciencia.

Liberarse de los condicionamientos y mantener una convicción firme es la actitud que puede evitar que el pensamiento de los otros afecte la conciencia, produzca bloqueos, amargura, quite la esperanza y el deseo de crecer y de vivir.

Cada uno puede construir su propia realidad que puede ser un paraíso o un infierno; porque algunos parecen poner todo su empeño en crear vidas miserables mientras que otros pueden vivir vidas sublimes, repletas de amor, de relaciones sanas y de buenos pensamientos.

La posibilidad de elegir es de todos y depende de la manera de pensar.

Brian Weiss nos dice que el amor no es algo abstracto sino algo concreto, porque es conciencia creadora. El que ama tiene una vida feliz pero el que tiene resentimiento, odio o se siente culpable no puede ser feliz.

Mi cuerpo sana cuando me río de mis propias limitaciones, de mis miedos, de mis bloqueos.

La inspiración hace que surjan nuevos talentos y permite reconocer que se puede ser la persona soñada.

El hombre ha nacido para ser feliz pero no lo puede creer, porque su conciencia, que es el espíritu encarnado en su cuerpo, ha olvidado y tiene que recuperar la memoria perdida.

Son los pensamientos los que interfieren para hacernos creer que solo somos un cuerpo. La conciencia es el observador y si no pensamos en el sentido de la vida estamos destinados a repetir historias.

La alimentación también influye en nuestra personalidad, en nuestro carácter y en nuestra salud y también todos nuestros sentidos; porque somos lo que comemos, lo que miramos, lo que escuchamos y lo que sentimos.

El ser humano es el vehículo que puede transformar lo malo en bueno, lo sucio en limpio, lo degradante en constructivo cuando se decide a ser el protagonista de su vida. Sus creencias y sus pensamientos se vuelven realidad, pero todo lo malo que proyecta vuelve multiplicado.

Cuando cambia la forma de ver el mundo, el mundo también cambia y la fe es la posesión anticipada de ese milagro.

Atraemos situaciones afines a lo que hemos pensado o vivido y solo si cambiamos de polaridad y tenemos coraje podremos cumplir nuestro destino.

El que desea estar sano tiene que estar dispuesto a evitar todo lo que lo enferma y atreverse a ser él mismo; porque el hombre no tiene límites pero es también el que crea sus límites.

Vivir mejor es siempre seguir adelante sin mirar atrás, conectados con la totalidad y enfocados en el propio desarrollo personal genuino.

No podemos culpar a nadie, somos responsables de nuestra vida y el perdón es lo que nos permite ser protagonistas de la existencia.

El ruido lo provocan las ideas y los pensamientos de los demás mientras el silencio es la oportunidad que tenemos para escucharnos a nosotros mismos.

Fuente: “Muchas vidas muchos maestros”, Brian Weiss