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El Pensamiento de Sócrates

Publicado por Malena

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Existen distintas fuentes que describen el pensamiento de Sócrates, ya que él no dejó nada escrito, pero resulta difícil precisarlo con verdadera exactitud porque difieren entre si.

Para Jenofonte a Sócrates le interesaba principalmente la moral de los hombres y la formación de buenos ciudadanos, y no se preocupaba demasiado de la lógica ni de la metafísica.

Sin embargo, a partir de los diálogos de Platón, Sócrates aparece como un metafísico de primer nivel que sentó las bases de una filosofía trascendente, que se distingue por ser una teoría sobre un mundo metafísico de las Formas.

Pero no se puede olvidar que Platón, según el testimonio de Aristóteles, exceptuando en sus primeras obras, mezcló sus propias teorías con las ideas de Sócrates.

Karlo Joel, basándose en Aristóteles, sostiene que Sócrates fue un intelectualista o racionalista en tanto que Jenofonte pensaba que era un ético de la voluntad de estilo espartano desfigurando así su doctrina.

Según Burnet y Taylor, en Inglaterra, el Sócrates histórico es el que describe Platón, que sin duda superó a su maestro gracias a sus enseñanzas.

Es evidente que en sus últimos escritos Platón prescinde totalmente de Sócrates, lo que hace suponer que cuando aparece en los diálogos como interlocutor principal Platón se está refiriéndose efectivamente a las ideas de Sócrates.

Ninguno puede afirmar que los Diálogos de Platón no contienen ningún aporte del Sócrates histórico, debiendo reconocer que la doctrina platónica representa una continuación de las enseñanzas de su maestro.

Por lo tanto, se puede aceptar que si bien Jenofonte no describe un retrato completo de Sócrates, tampoco se puede considerar autor absoluto de los diálogos de Platón.

Aristóteles estuvo veinte años en la Academia de Platón, de modo que su opinión es más que autorizada como para descartarla como hipótesis.

Él consideraba que a Sócrates se le pueden atribuir dos adelantos científicos, el empleo de los razonamientos inductivos y de la definición universal. De modo que Sócrates se ocupó de la posibilidad de alcanzar los conceptos precisos y fijos a diferencia de los sofistas que tenían teorías relativistas.

Para Sócrates, el concepto universal siempre es el mismo, lo que varía son los ejemplos concretos.

Por ejemplo todo hombre es un animal racional, y esta definición permanece inalterable aunque su conducta sea diferente a la de otros hombres. De modo que existe lo que no cambia, o sea el concepto universal o la definición de los objetos, en un mundo en permanente cambio, de objetos imperfectos y cambiantes que es el de nuestra vida cotidiana.

Sócrates consideraba de importancia a las definiciones universales porque se interesaba principalmente en la conducta ética, porque éstas representaban la base sólida para que los hombres pudieran salir del relativismo de las doctrinas sofistas.

Para los sofistas, la justicia, por ejemplo, es diferente de una ciudad a otra, en cambio si se logra una definición universal de lo que significa la justicia para que sea válida para todos lo hombres, se podrá tener algo seguro sobre lo cual construir y se podrán juzgar las acciones individuales con códigos comunes a todos los estados.

Según Aristóteles, Sócrates utilizaba el razonamiento inductivo, pero no desde el punto de vista de un lógico sino en el plano de la dialéctica o conversación, guiando a su interlocutor a arriesgar definiciones hasta llegar a la más precisa, o sea a una definición universal y válida, procediendo de lo particular o menos perfecto a lo universal o más perfecto.

Sócrates llamó a este método “mayéutica” (obstetricia) haciendo referencia a su madre que era partera, como un símbolo de su intención de que los demás diesen a luz ideas verdaderas.

Así Sócrates se ocupó principalmente por la ética y por las virtudes del carácter; y en virtud de este interés fue el primero que se ocupó del problema de las definiciones universales.

Además de su influencia en la filosofía, Sócrates también tuvo un impacto significativo en la educación. Su método de enseñanza, conocido como el método socrático, sigue siendo utilizado en muchas escuelas y universidades en todo el mundo. Este método se basa en la idea de que el conocimiento se descubre a través del cuestionamiento y la discusión, en lugar de simplemente ser transmitido por un maestro.

Sócrates también fue un defensor de la autodisciplina y la moderación. Creía que la verdadera felicidad no se encuentra en la satisfacción de los deseos materiales, sino en la búsqueda de la virtud y la sabiduría. Esta creencia se refleja en su famosa frase: «El hombre no vive para comer, sino que come para vivir».

A pesar de su influencia y contribuciones a la filosofía y la educación, Sócrates también fue una figura controvertida en su tiempo. Fue acusado de corromper a la juventud y de no respetar a los dioses de la ciudad, cargos que finalmente llevaron a su condena a muerte. Sin embargo, incluso en sus últimos momentos, Sócrates mantuvo su integridad y se negó a renunciar a sus creencias.

Fuente: Sócrates y Platón, Colección Grandes Pensadores, Editorial Planeta DeAgostini, España, 2007