Filosofía Moderna-Segunda Parte
La experiencia sensible, el origen de las ideas es, según el empirismo inglés
Además de Descartes, otros representantes notables del racionalismo imperante de la filosofía moderna fueron el holandés Spinoza(1632-1677) y el alemán Leibniz(1646-1716).
Spinoza estaba muy interesado en las nuevas ideas científicas y filosóficas que lo llevaron a ser expulsado de la sinagoga y subsistir con el oficio de pulidor de lentes.
Su filosofía constituye un desarrollo del pensamiento cartesiano y al mismo tiempo una reacción contra éste.
Tres aspectos de la filosofía de Descartes no le gustaban: el tema de la trascendencia de Dios, el dualismo mente cuerpo y el hecho de atribuirle a Dios y a los seres humanos el libre albedrío.
Para Spinoza, tales afirmaciones hacían al mundo ininteligible, porque era imposible explicar la relación entre Dios y el mundo o entre el cuerpo y la mente, así como explicar los acontecimientos producidos por el libre albedrío.
En su obra maestra “Ética” elabora un sistema de metafísica monista en forma deductiva según el modelo euclidiano.
Leibniz, filósofo, matemático, inventor, jurista, historiador, diplomático y consejero político alemán, a los veinte años se doctoró en Leyes.
Colaboró en la fundación de la Academia Alemana de Ciencias de la cual fue el primero en presidirla.
Su teoría metafísica de la mónada describe a la realidad constituida por estas sustancias simples que consisten sólo en percepción y apetito.
Cada estado de la mónada es causa de la siguiente y efecto de la anterior pero no hay relación causal entre ellas porque la aparente relación entre las sustancias es debida al supuesto de la existencia de una armonía preestablecida entre los estados perceptivos de las distintas mónadas.
Según Leibnitz, el mundo actual es el mejor de todos los mundos posibles y Dios es el único perfecto.
En matemáticas, trató de desarrollar la idea de un lenguaje lógico matemático universal, basado en un sistema numeral binario y descubrió el teorema fundamental del cálculo independientemente de Isaac Newton, provocando una áspera disputa sobre la prioridad en el hallazgo.
Inglaterra se vio retrasada una generación por este conflicto, antes de adoptar la notación y los métodos superiores de Leibniz.
Contribuyó al avance de la óptica y la mecánica y es considerado el último polimatemático de la civilización occidental.
A partir del idealismo de Descartes el problema del conocimiento sólo se puede plantear de una manera racional, como ya hemos visto en los párrafos anteriores o de una manera psicológica.
John Locke, Berkeley y Hume son los principales representantes del empirismo, con un abordaje psicológico frente al problema del conocimiento.
John Locke(1632-1704) sostenía que el conocimiento comenzaba con la sensación o introspección más que en las ideas innatas, como afirmaban los racionalistas.
La mente recibe ideas de las sensaciones y la reflexión que son el material del conocimiento. Algunas de ellas representan cualidades reales de los objetos, como su tamaño, forma o peso y otras ideas son producto de la percepción del sujeto, como el olor, el color, gusto, etc.
Berkeley(1685-1753), a diferencia de Locke, no cree que exista el mundo material fuera de la mente, sino en que los objetos son ideas y que la realidad es de índole espiritual.
Hume(1711-1776), sostiene que las ideas, entre ellas las de espacio, tiempo y causalidad tienen su origen en la experiencia sensible y le asigna a la mente un papel subordinado a la razón.
Hume es considerado uno de los grandes filósofos del empirismo.