Estética de la música griega

El arte arcaico de la antigua Grecia se fundamentaba sobre la base de cánones que aunque no estaban escritos su cumplimiento era obligatorio. Por otra parte, era un arte racional cuyo único objetivo era la perfección. No se trataba de ser original o de encontrar el esplendor, de elevarse por encima del resto. Siguiendo aquellos cánones obligatorios había que alcanzar la perfección, y punto.

Así, Platón conminaba a que aquel arte fuera respetado siempre, se permitían variantes pero si éstas no introducían formas o principios nuevos. Lo que era debía ser siendo siempre. Resulta que para el filósofo ateniense aquél era el que mejor reflejaba la verdad y servía para forjar el espíritu del hombre. De ahí que considerara decadente el arte de su tiempo, que comenzaba a convertirse en otra cosa, a introducir nuevas normas y corrientes artísticas.

De hecho, en vida de Platón, tanto la escultura como la pintura comenzaron a explorar una vía más subjetiva e impresionista. Y, atendiendo a la obra de Eurípides, también parece que la poesía comenzó un camino similar. E igualmente ocurrió con la música, a pesar de que era el arte quizás más conservador, más rígido, también sufrió un cambio. De ahí que los defensores de aquel arte arcaico, como Platón o Plutarco (por mencionar a dos grandes del pensamiento griego) consideraran el siglo V como el inicio de la «decadencia de la música». Aunque lo podríamos extender, por lo menos desde este punto de vista, al arte en general.

El caso de la música

Respecto a la música, se consideran a Melanípides, Frínico de Mitilene y Timoteo de Mileto (discípulo del anterior) como responsables de ese cambio en el siglo V en la música griega. Su principal labor fue trabajar sobre la melodía, haciendo preponderar ésta sobre el ritmo, lo contrario que había ocurrido hasta la fecha.

Pero probablemente fue Timoteo el que introdujo el gran cambio ya que con su estilo propio concluyó con el anonimato del artista. El arte dejó de ser anónimo, los creadores musicales comenzaron a ser reconocidos. Y el público cada vez estaba más entusiasmado.

La música instrumental cogió el testigo de la importancia que había tenido la música vocal hasta entonces, separándose de la poesía, consolidándose como un arte aparte. Así, estaba por un lado la música propiamente instrumental; y por otro, la poesía para ser leída y no ya cantada.

En el caso romano, si bien primitivamente le daban muy poca importancia a la música, sobre el siglo II a. C., según cuenta Livio, Roma fue invadida por la música de oriente. También fue influida por la música griega. Así se abrieron escuelas de danza y canto. Sobre todo en la época de los césares, ya que si bien la aristocracia estaba anclada al pasado y no veían con buenos ojos las nuevas formas musicales, los césares eran más del gusto del pueblo. De hecho, hay bastantes casos de músicos a los que se les retribuyó con grandes honores.

Si asumimos la idea ciceroniana que establece que los cambios sociales influyen en el arte, en estos cambios podemos ver un cambio de visión no sólo del mundo del arte, sino del mundo, en general.

Imagen: millrod.es