Cicerón y la visión sociológica del arte

Cicerón entendía el arte desde un punto de vista plural. Es decir, consideraba que no existía una única forma de entender y de crear arte. Y no sólo me refiero a que asumía la existencia de distintas disciplina, pues resulta bastante evidente que la pintura no es lo mismo que la arquitectura o que la poesía. La afirmación anterior significa más bien que el pensador romano no asumía una concepción bastante extendida en la antigüedad y por la que se entendía que existía un principio rector por el que se debían regir todos los artistas, independientemente de la disciplina artística a la que lo aplicasen, y que atañía tanto al arte como a la belleza. Una concepción defendida y extendida tanto por los pitagóricos como por Platón y sus discípulos.

Por el contrario, Cicerón veía que diferentes pintores con técnicas diferentes llegaban a la belleza desde caminos divergentes, donde su arte también era diferente y no por ello eran unos peores que otros. Podían ser igual de excelsos e igualmente admirados, puesto que:

Esta visión fue en primer lugar presentada por Aristóteles y, en siglos posteriores, potenciada por el propio Cicerón.

La importancia de lo social

Tanto en la antigua Grecia como en los siglos posteriores, es decir, tanto en la época Helénica como en la helenística, la belleza y el arte eran interpretados desde un punto de vista metafísico y ético. O por lo menos estos eran los dos puntos de vista principales puesto que también el descriptivo era una interpretación posible. Pero el resto de opciones eran, de serlo, marginales.

Sin embargo, Cicerón, como asegura Tatarkiewicz, estudia el arte desde una perspectiva histórica, analizando la trayectoria de las diferentes artes, sus avances y desarrollo, concluyendo que las ideas que se fueron generando a lo largo de la historia, y que en un primer momento estaban esparcidas, terminaron por fundirse en una concepción unificada del arte.

Así, podemos leer en su De oratore que:

Por supuesto, ocurría lo mismo con el arte de la oratoria y sus elementos, como son:

Por otra parte, Cicerón también analiza el arte desde un punto de vista sociológico, llegando a la conclusión de que las condiciones sociales influían sobre el arte, de que el deseo de gloría es una parte importante de que los seres humanos, algunos por lo menos, se dediquen al arte, en aquellos lugares donde la excelencia en dicha práctica trae consigo honores y gloria, claro.

Su forma de ver el arte, evidentemente, está influida por la teoría filosófica a la que se adscribe, el eclecticismo, de ahí que muchos de sus ideas sean síntesis de otras, pero también, como hemos visto a lo largo de esta serie de artículos que le hemos dedicado, descubrimos en él ideas novedosas que influirán más adelante en otros artistas y pensadores.

Imagen: adevaherranz.es